Una mezcla de píldoras para prevenir accidentes vasculares
( Publicado en Revista Creces, Julio 2003 )

Se propone una mezcla de píldoras que por diferentes mecanismos de acción se han comprobado útiles para prevenir accidentes vasculares. Se piensa que al administrarlas todas juntas a los mayores de 55 años, se podría multiplicar su acción preventiva.

Según diversos estudios epidemiológicos, hay píldoras buenas para bajar el colesterol, otras para bajar la presión sanguínea, otras para disminuir la agregación plaquetaria. ¿Por qué no mezclarlas todas y agregarle una vitamina? Según afirma Nicholas Wald y Malcolm Law del Instituto Wolfson de Medicina Preventiva en Londres, en el "British Medical Journal" (Junio 2003), "sería la mejor medida posible para prevenir enfermedades cardiovasculares".

La idea es ofrecer a todos los mayores de 55 años, una combinación de cinco drogas baratas, que no pagan patentes, más una vitamina (ácido fólico). Con ello se disminuirían los ataques cardíacos en un 88% y los ataques cerebrales en un 80% (ver figura 2). Según los cálculos, con esta medida se incrementaría la expectativa de vida de estas personas en 11 años, lo que significaría que sólo en Estados Unidos se salvarían 800.000 vidas por año. Si la medida se extendiera a todos los países occidentales, se salvarían millones de vidas.

Wald y sus colaboradores, que están patentando la idea, esperan encontrar un financista que desarrolle la multi-píldora. Según lo han programado, esperan desarrollar un ensayo clínico en trescientos voluntarios para llegar a identificar las drogas específicas que incluirían en la poli-píldora. Luego extenderían el ensayo a miles de voluntarios, comparando los efectos de la administración de esta poli-píldora con un placebo.

Los autores afirman que la idea de la poli-píldora es radical. “Significa que en lugar de administrar las píldoras a personas de alto riesgo, como se ha hecho hasta ahora, se darían a personas sanas para prevenir en ellas la enfermedad. Wald hace notar que la mayor parte de las personas que llegan a sufrir ataques cardíacos o cerebrales, no sabían que ellas estaban en riesgo. De esta forma si se quiere producir una gran diferencia, habría que administrar la poli-píldora a todos los mayores de 55 años. Ya se han hecho esfuerzos para prevenir las enfermedades cardíacas, mediante los cambios de estilo de vida, como dejar de fumar, modificar la dieta, o hacer ejercicios, medidas todas que no siempre son efectivas. En todo caso, esas recomendaciones no son excluyentes y podrían darse además de las píldoras.

Los críticos afirman que las poli-píldoras pueden producir serios efectos colaterales: la aspirina puede causar hemorragias internas, mientras que las drogas para la presión pueden causar mareos y desmayos. Sin embargo Wald contra argumenta que los beneficios serían mucho mayores que los riesgos: un tercio de los que tomen la píldora vivirían más, mientras que sólo un 8 a un 10% podrían tener efectos secundarios.

El admite que las aspirinas pueden causar hemorragias, pero por otra parte previenen los ataques. Para controlar la presión arterial se pueden combinar tres drogas de mecanismos de acción diferente, con lo que se disminuirían los efectos secundarios. Con ello se beneficiarían aun las personas con presión arterial normal. "Todas las evidencias señalan que mientras más baja es la presión, mejor es para la persona”.

Otros argumentos en contra señalan que combinar muchas drogas en una sola píldora y administrarlas por igual a todas las personas es peligroso, ya que las personas son diferentes. Con todo el Food and Drug Administration de USA, recientemente ha autorizado, para personas que sufren del corazón, una píldora en que se combina el "statin" (para el colesterol) con "aspirina". Bajo el mismo principio podría aprobar muchas otras combinaciones como las que se sugieren en la poli-píldora (New Scientist, Julio 9 del 2003, pág. 4).


COMO FUNCIONARIA LA POLI-PÍLDORA

Los cuatro mayores riesgos para las enfermedades cardiovasculares son: los altos niveles de lipoproteínas de baja densidad (LDL), el colesterol y homocisteína en la sangre, la alta presión arterial y la tendencia de la sangre a coagular por la agregación de las plaquetas. (La ligación con la homocisteina permanece controversial.) La idea de la poli-píldora es combinar en una sola droga, seis drogas diferentes que se sabe disminuyen estos factores de riesgo.

Se puede calcular la reducción del riesgo de un ataque cardíaco o de un ataque cerebral, en base a la información de los ensayos clínicos de cada una de las drogas. Los proponentes de la poli-píldora afirman que los beneficios que se obtienen con la administración de cada una de las píldoras, son independientes entre sí. En otras palabras, si se logra bajar el colesterol y la presión arterial, la reducción del riesgo es mayor que si se baja sólo uno de esos factores de riesgo.

Para imaginar la efectividad total de la multi-píldora, los autores multiplican el riesgo relativo. Para entender lo que esto significa, imaginen 100 personas con riesgo de ataque cardiaco a las que se les ha administrado statín que reduce el riesgo en un 60% sobre cinco años. En los próximos 5 años sólo 40 de los 100 sufriría ataques cardíacos. Si a los 100 también se le administran drogas para bajar la presión arterial, se bajaría el riesgo de ataques cardíacos en un 50%. Quedarían sólo 40 con riesgo, pero sólo la mitad de ellos (20) sufriría ataques cardíacos. Las dos drogas juntas reducirían el riesgo en un 80% (60+20) (ver figura 2).

Según los proponentes de la multipíldora, el punto clave, es que algunos de ellos no se beneficien de algún componente, pero aun así se beneficiarían con el otro. Si no los salva el statin, los salvara la disminución de la presión arterial.


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