Ello ha provocado una gran alarma por las posibilidades de contagio de la enfermedad llamada de "las vacas locas", dado que los priones causantes precisamente infestan estos tejidos y el calor, a diferencia de bacterias y virus, no los inactivan.

Según los ganaderos alemanes, en su país el ganado no está infestado por la enfermedad de las vacas locas, ni tampoco sus salchichas contienen tejido cerebral. Pero Ernst Lucker de la Universidad Giessen, con el nuevo test que determina una enzima que es exclusiva de las neuronas (enolasa), afirma otra cosa. Si bien es cierto que en Alemania no es ilegal el agregado de tejido cerebral a las cecinas, la población está temerosa, ya que nadie puede certificar que la enfermedad de las vacas locas no haya ya infestado al ganado de Alemania, como ya se ha demostrado en otros países de Europa.